Modelos de diseño y desarrollo de estrategias instrucionales
Unidad 1
Fundamentación teórica y conceptual
Tema 1.2 Relación educación y sociedad

La educación no sería posible sin la interacción de un medio sociocultural. La educación es un proceso de perfeccionamiento que acontece gracias a las capacidades humanas y al medio sociocultural; por tanto, es un fenómeno tanto individual como social, en su realización como en sus fines.

Cada sociedad determina su sistema educativo con base en las características de su población, cultura y sistema político y transmite valores y pautas de conducta acordes a ello.

La educación forma a los individuos para funcionar dentro de los valores legitimadores de la doctrina política y social que prevalece, de modo que la relación entre sociedad y educación es bidireccional.

En América Latina, existen deudas históricas en el campo educativo. De acuerdo con Álvaro Marchesi, no es suficiente con que la educación apueste por los valores democráticos, la justicia, la participación y la equidad, si al mismo tiempo no existen iniciativas políticas, económicas y sociales que avancen en la misma dirección. No es posible una educación equitativa en una sociedad tan desigual como la iberoamericana. Y tampoco es posible avanzar en sociedades más justas sin una educación equitativa, en la que estén garantizados unos mínimos comunes de calidad para todos los alumnos.

Para que un niño pueda completar exitosamente la trayectoria educativa esperada, se requiere que su familia tenga un nivel aceptable de bienestar ya que de ese modo se hace posible darle a su educación la prioridad que merece. Si le pedimos que pase la mayor parte de su tiempo en la escuela no podemos hacer que sobre él recaiga la responsabilidad de su supervivencia ni la de su familia.

Sylvia Schmelkes afirma que una sociedad más justa e igualitaria supone también una educación más justa e igualitaria. Si bien lo segundo no necesariamente causa lo primero –o al menos no es la única causa de lo primero–, lo que sí es cierto es que lo primero no puede darse sin que se dé lo segundo. Por tanto, si queremos una sociedad más justa, necesitamos una educación más equitativa.