La metodología empleada por la Programación neurolingüística es el modelaje. Modelar es el proceso de recrear comportamientos específicos. Para poder modelar de forma eficaz se requiere agudeza sensorial, habilidades verbales y no verbales para obtener información de alta calidad. La prueba de cualquier modelo reside en poder conseguir los mismos (o mejores) resultados que los "sujetos" elegidos para modelar. El modelado ha llegado a ser una metodología abierta y epistemológicamente coherente, produciendo día a día nuevos modelos con aplicaciones a todos los campos de actividad humana en los que el individuo interactúa. Existen ocho etapas básicas del proceso de modelado:
- Definir especialistas y contextos.
- Recopilación de información.
- Filtrar los resultados de la recopilación de información.
- Organizar los patrones en una estructura lógica.
- Poner a prueba la eficacia y utilidad del modelo.
- Reducir el modelo a su forma más sencilla.
- Definir el mejor procedimiento para transferir las habilidades explícitas.
- Determinar los instrumentos más apropiados para medir los resultados.