Dinámica y conducción de grupos en el aula
Sesión 1.
Contexto, historia y paradigmas educativos
1.1 Introducción

Como un primer paso para introducirnos en el campo de la dinámica de los grupos, es conveniente distinguir dos niveles de realidad dentro de la vida del grupo; el nivel de lo manifiesto, y el de lo latente. Es importante identificar que la dinámica de grupos tuvo su origen en Estados Unidos a finales del año 1930, por la preocupación de la mejora en los resultados obtenidos en el campo político, económico, social y militar de ese país; la convergencia de ellas, este postulado se basa en la teoría Gestalt, elementos que contribuyeron a fundamentar la teoría de la dinámica de grupos. Kurt Lewin, psicólogo norteamericano, fue el pionero en el estudio de grupos, con su teoría del comportamiento fundamentó no sólo el estudio individual, sino también accedió a la interpretación de fenómenos sociales.

A continuación revisa el siguiente video "Introducción": Al finalizar es importante que retomes los puntos relevantes del tema del video.


La historia nos ha enseñado que el tema de la educación siempre ha estado presente en el centro de las discusiones más importantes del pensamiento humano. Paradigmas disciplinarios y humanistas se han enfrentado a lo largo de los siglos. Ello demuestra que la educación es, ante todo, una cuestión social y que la formación de conciencias está fuertemente influida por motivos ideológicos; sin embargo, el nuevo orden social resalta la importancia de la educación por motivos de formación humana. Es cierto que la educación es un proceso complejo, pero, dentro de su diversidad, la formación humanística adquiere un valor relevante, pues posibilita el mejoramiento integral de los procesos en los que se desenvuelve el individuo. La nueva era de la economía del conocimiento exige conciencia científica y crítica capaz de analizar y mejorar las cosas, a la vez que desarrolla habilidades para la interacción social y la integración de equipos de trabajo. En este contexto, el docente debe cobrar consciencia de la importancia de hacer ajustes en su concepción educativa y adoptar una posición crítica respecto de la manera tradicional de la relación pedagógica, donde la relación entre el docente y el alumno se perciba de modo más completo y satisfactorio para ambos, analizando y transformando ciertas condiciones que favorecen la enajenación del trabajo docente y del proceso de aprendizaje.


Content on this page requires a newer version of Adobe Flash Player.

Get Adobe Flash player



A continuación, revisa la siguiente lectura: Lo manifiesto y lo latente

Hemos terminado de revisar la Introducción de la unidad I. Continúa con esta participación activa.

Ahora verás el tema 1.2. El papel de docente.